Su familia y sus amigos se reúnen cada miércoles en la plaza mayor de este municipio del Baix Llobregat para recordarla y para evitar que caiga en el olvido, informa El Caso.
Janet Jumillas fue a Cornellà después de dejar a los hijos en la escuela. Tenía que hacer una gestión en Hacienda, la hizo y después envió un mensaje a su primo que volvía hacia Viladecans. Después de este mensaje de voz, se perdió su pista y desapareció sin dejar rastro.
Cinco días después de la desaparición se encontró el coche de la mujer en la zona de Cornellà donde dijo que estaba: el coche estaba cerrado y sin signos de criminalidad. Es de las pocas pistas que manejan los Mossos d'Esquadra.
Una de sus cuñadas, la pareja de Fernando Jumillas, explica que "la esperanza es el último que se tiene que perder", sin embargo, van pasando los días y algunos de los familiares empiezan a aceptar que la esperanza se agota.
"Me despertaba cada día pensando que tendría un mensaje diciendo que mi tía estaba bien y viva y que había vuelto", explica a El Caso Sara, una de las sobrinas de Janet Jumillas. "Ahora sólo deseo que aparezca, sea como sea", explica, resignada.
Los padres de los hijos de Janet Jumillas, en el punto de mira por la desaparición de la mujer