Tras retirarle la alimentación artificial, Andrea ha pasado su primera noche bien en semanas, según ha explicado el abogado de sus padres. Dice que la pequeña se encuentra en un grado de confort aceptable. Su familia le arropa en estos momentos.

Andrea continúa su lucha final. Ahora, no recibe ningún tipo de alimentación y solo se le proporciona una hidratación mínima para que la sedación haga efecto. La pequeña recibe una sedación que irá aumentando cuando su estado empeore. Un duro trance para los padres que puede prolongarse hasta un mes.

Estela y Antonio, los padres, llevaban semanas pidiendo una muerte digna para la niña. Ahora, han dado las gracias en la redes sociales tras el apoyo recibido.

El hospital dio marcha atrás y comunicó a la familia que retirarían la alimentación a la menor sin que finalmente lo dictaminase un juez. Justifican su cambio de criterio asegurando que la niña ha empeorado.

Además, ha cambiado de pediatra. Ahora es el doctor Antonio Justicia, el único que aceptó encargarse de la sedación según ha informado el abogado. Los padres de Andrea confían en que su caso pueda abrir camino a otras familias. Ellos han logrado que su pequeña tenga por fin una muerte digna.