A las 14:00 horas de ayer, miércoles, la piscina de Luna (Zaragoza) en la que un operario fallecía tras producirse una explosión estaba llena de gente, unas 60 personas en total. Justo a esa hora, un trabajador municipal y otro de una empresa de limpieza industrial realizaban los trabajos de llenado de cloro en un depósito de grandes dimensiones.

Sin embargo, algo salió mal y se produjo una explosión, seguida de una nube tóxica que afectó a ambos operarios, causando la muerte de uno de ellos. Aunque intentaron reanimarle durante más de 45 minutos en el centro de salud de la localidad, no pudieron salvar su vida.

El otro trabajador fue trasladado al Hospital Miguel Servet de Zaragoza, donde continúa ingresado en estado grave. La nube tóxica generada afectó además a tres menores, de tres, siete y nueve años, que en ese momento estaban en la piscina. Aunque también fueron trasladados al hospital, ya han sido dados de alta.

Mientras en Luna siguen consternados por el accidente, las primeras investigaciones apuntan a un error a la hora de cargar el depósito de cloro de la depuradora.

Según explica José Martí, director general de de Industrias Químicas Tamar, "un depósito contiene hipoclorito, el cloro, y el otro, el ácido" que puede ser clorídrico o sulfúrico. "Ambos productos son antagónicos y reaccionan químicamente, provocando una nube de clorogas", explica.

Una reacción que, según apunta, puede llegar a provocar una explosión: si se cierra la tapa del depósito y se deja "la reacción química encerrada", de forma que "sigue reaccionando y al final provoca el estallido del depósito".

Por eso, los expertos recalcan la necesidad de cuidar la seguridad y "supervisar muy bien, otra vez y las veces que sea necesario hasta estar seguros de que el producto que vamos a descargar va al contenedorque tiene que ir", en palabras de Carlos Marín, director técnico de Apliclor Water Solutions. Para ello, es aconsejable nombrar los depósitos, cambiarlos de color o usar mangueras de diferentes tamaños o bocas.

Por ahora, la Guardia Civil sigue investigando las causas del accidente y el Ayuntamiento de Luna ha decretado tres días de luto oficial.