El ensayo clínico del ocio nocturno realizado en Sitges, en el que casi 400 personas acudieron a locales nocturnos sin distancia social pero con mascarilla, ha concluido sin casos positivos de coronavirus. Así lo ha anunciado este viernes Joan Colom, subdirector general de Consellería de Salud de la Generalitat de Cataluña.

Colom ha comentado que se trata de una "experiencia exitosa, sin incidentes, que sirve para demostrar que el riesgo de transmisión es mucho menor". Ha aseverado que esto "pone de manifiesto el resultado positivo sin transmisión y ha permitido ver que se está en condiciones de apertura del ocio nocturno".

También ha asegurado que este estudio "contribuye a tener una idea", pero recalca que "la vida cotidiana va por otro ritmo": "Por un lado, la gran cobertura de la vacunación nos permite tener seguridad. Por otro lado, los nuevos mecanismos, como el Certificado Europeo, ayudarán".

Damiá Orts, empresario del ocio nocturno de Sitges, se ha mostrado abierto a hacer tests de antígenos en la puerta de las discotecas para prevenir aún más el contagio. Sobre la apertura de la noche, ha asegurado que "nunca" han tenido dudas para reabrir el sector. "Estábamos convencidos que el resultado sería contundente. Espero que esto anime a dar pasos hacia adelante", ha dicho.

Estos resultados llegan después de que el comité técnico del Plan de Protección Civil de Cataluña aprobase el miércoles el plan sectorial del ocio nocturno. Ello permitirá la apertura de los locales nocturnos a partir del lunes hasta las 3:30 horas.

Un experimento deseado

El pasado 21 de mayo, la localidad de Sitges albergó una prueba en la cual 391 personas asistieron a cinco locales de ocio nocturno sin guardar distancia de seguridad en la calle Primer de Maig. Sí contaban con otras medidas de prevención, como la mascarilla o el gel hidroalcohólico. Además, fueron sometidos previamente a una prueba de antígenos.

Cuando se supo la noticia, la alcaldesa de la localidad, Aurora Carbonell, se mostró partidaria de la reapertura de estos locales: "Queremos esta recuperación económica del ocio nocturno, un sector económico que lleva muchísimo tiempo cerrado. Queremos que los trabajadores puedan volver a abrir y a trabajar y, por otro lado, queremos que la sociedad pueda disfrutar también del ocio nocturno".

Una voluntaria, llamada Aitana Llimos, se mostró ilusionada de participar en una prueba que podía suponer el principio de la vuelta a la normalidad: "Es como un alivio, como que todo vuelve a la normalidad después de tantos meses", decía.