Cristina lleva toda la vida esperando este momento. No puede evitar emocionarse, porque es lo más cerca que ha estado de su abuelo, asesinado tras el golpe militar de 1936. "Tienes dolor ahí, supongo y espero que cuando te confirman 'este es tu familiar', respiras. Dices: tengo adónde mirar, adónde decir adiós'", explica.

Como ella, Isidro espera poder encontrar a su tío, asesinado cuando tenía apenas 17 años. "Me gustaría que lo encontraran y hacerle su debido homenaje", apunta. Podrá hacerlo si el suyo es uno de las 10 cuerpos encontrados en tres fosas de Paternáin, en Navarra, donde se han iniciado los trabajos para exhumar los restos.

Antonio, vecino de la localidad, fue quien reveló dónde se encontraban. Él recuerda cómo sus padres le contaban que en ese lugar "fusilaron a unos cuantos".

Desde el Instituto Navarro de la Memoria defienden que fueron asesinados en los días posteriores al golpe de Estado. Imanol Ibáñez precisa que allí "puede haber gente que ha sido sacada de la prisión de Pamplona" y que saben de "un ferroviario que fue a por él a su casa la Guardia Civil". Entre los allí enterrados -agrega- también puede haber "otros que pudieron ser detenidos en sus casas o en la calle incluso".

La hipótesis es que fueron ejecutados de un tiro en la cabeza y la mayoría de los cadáveres presentan el cráneo destrozado. Posteriormente, los restos serán analizados en el laboratorio y cotejados con el ADN de los familiares. Cristina espera saber algo en unas semanas y que su madre, de 89 años, pueda verlo.