El fuego sigue avanzando descontrolado en la Sierra de Gata, 350 efectivos no pueden con él. Las fuertes y cambiantes rachas de viento lo hacen indomable. La visibilidad para trabajar desde el aire es nula. La espesa cantidad de humo en la zona obliga a los agentes a respirar con mascarilla.

En cuestión de 24 horas, ya se han calcinado más de 5.000 hectáreas. "Es la primera vez que veo un fuego así, es una impotencia, es para llorar", cuenta una vecina.

Las grandes dimensiones del incendio han obligado a intervenir a 100 militares y equipos del ministerio de Agricultura.

Durante toda la noche la ausencia de medios aéreos ha hecho que el fuego haya hecho un recorrido importante.

Tanto que las llamas llegaron a devorar las casas de algunos vecinos. Un fuego devastador, que podría haber sido provocado.

Guillermo Fernández Vara, presidente de la Junta de Extremadura ha dicho que "tiene toda la pinta de ser provocado, es muy raro que en una semana se haya concretado todos los incendios"

Ahora, luchan para que las llamas no alcancen la provincia de Salamanca. Las próximas horas serán críticas porque las temperaturas serán altas y el viento más fuerte.