Víctor tenía 20 años, quería opositar a Policía Nacional, pero murió en la carretera cuando iba a trabajar. "No llegó, se encontró de frente con un kamikaze y ya está", explica José Casado, tía de Víctor.

Un Kamikaze que circulaba bajos los efectos del alcohol acabó con su vida, "una persona que destroza así, porque sí, a una familia no tiene derecho", añade Casado.

Su familia lucha por pedir que las penas sean más duras y que estos actos no queden impunes.

"A aquel que con consciente desprecio pone en riesgo la vida de las personas, aunque no haya ningún resultado, se le puede aplicar una pena de hasta cinco años", asegura Mario Arnaldo, presidente de Automovilistas Europeos Asociados.

Penas que varían según los daños. "Si los tribunales consideran que esa conducta no fue un homicidio imprudente, sino que fue doloso, la pena puede llegar hasta 15 años", apunta Arnaldo.

Las asociaciones de tráfico piden aplicar adecuadamente las penas

Desde las asociaciones de tráfico se pide que esas condenas se apliquen de manera adecuada. "Debe aplicarse el delito de homicidio doloso en todos los casos que sea posible No sirve que esté despistado", indica Francisco Canes, presidente de la asociación DIA Víctimas de Accidentes.

Accidentes que se han reducido en los últimos años. "Son muy pocos casos, la mayoría son por equivocaciones y no podemos provocar el miedo en la carretera", destaca Jorge Castellanos, jefe de Seguridad Vial de Race.

Evitar maniobras bruscas, esencial

Existe miedo en la carretera y, según los expertos, ese temor debe de desaparecer. Para ello hay que saber actuar ante los kamikazes.

Entre los consejos: reducir la velocidad, desplazarse a la derecha, y encender las luces de emergencia. "Lo más importante es mantener la calma, es complicado, pero muchos accidentes se producen por una maniobra brusca", explica Castellanos. Actuar de la manera correcta puede salvar vidas.