Hay días en que, como niño, ir al colegio se disfruta: pisando nieve virgen o recolectando bolas mientras los padres llevan la mochila. Más vale tomarselo bien porque los meteorólogos dicen que va a nevar tan fuerte que se recordará durante años. Primero, porque va a ser una ola muy muy larga, con hasta ocho días de nieve. Lo peor ahora está en el Cantábrico. En Reinosa, donde se enorgullecen de fabricar el frío, andan retirando nieve prácticamente en manga corta.

"Es más cómodo para trabajar", asegura un vecino de la zona que anda como si hiciera un tiempo primaveral. En Villamanín, en León, andaban compañeros de laSexta informando en directo cuando ha empezado a nevar de una forma brutal. Hasta el punto de que han tenido que ir a resguardarse durante un rato. En Zuya, en Álava, les ha pillado este frente lleno de frío con la terraza puesta. En algunas zonas del norte ya tienen 50 centímetros de nieve, pero pueden llegar a los dos metros.

Por ello, un palmo de nieve como el que tienen ahora no parece asustarles. Tampoco hay preocupación en Aguilar de Campoo, en palencia. Tampoco en Medina de Pomar, en Burgos. La segunda peculiaridad de esta ola de frío que llega: es general. Va a nevar en casi todas las provincias. Sí, incluido el sur. En Benilloba, en Alicante, puede que no haya caído mucho, pero han cerrado el colegio. En Tenerife la Guardia Civil ha llegado a moverse en trineo para trabajar.

Pero hay algo todavía peor: además de mucha nieve, habrá hasta cuatro entradas seguidas de viento polar. La primera, que ya ha llegado, ha bajado las temperaturas a bajo cero por buena parte de España. La peor llegará el domingo: puede nevar en Madrid capital y cerca de Barcelona.