La madre de los niños hallados muertos y enterrados en Godella se escondió en el interior de un bidón azul en las inmediaciones de su vivienda. Allí fue localizada por un perro del servicio cinológico de la Guardia Civil tras activarse la búsqueda de los pequeños.

La mujer estaba desnuda y tenía arañazos producto de haber estado corriendo al aire libre. En un estado de desorientación, al ser localizada, la madre de los pequeños aseguró que una secta estaba persiguiendo a su familia.

'Espejo Público' ha tenido acceso en exclusiva a esa primera declaración a los agentes de la Guardia Civil: "Desperté a Gabriel de madrugada porque quería tener sexo, porque hace mucho tiempo que no nos acostábamos. Tengo miedo, porque Gabriel me ha pegado una paliza esta mañana y tengo mucho miedo y me estoy ocultando aquí. ¿Dónde están mis hijos?. Quiero ver a mis hijos, me da miedo que les haya pasado algo a mis hijos. Hay una secta que nos persigue y tengo un hijo que está poseído por el diablo".

Los agentes localizaron al padre de los pequeños en la vivienda. El joven afirmó no saber dónde estaban los menores, pero también aseguró en un momento determinado que "todos están muertos".

"Ayer por la tarde María arrojó a uno de mis hijos a la fosa séptica y yo tuve que salvarle la vida. Cuando me desperté esta mañana y no los veíamos me ha dicho María: 'No te preocupes, los niños están en mi corazón'", declaró a la Guardia Civil.