Más de 400.000 personas aseguran haber sufrido abusos por curas o religiosos, según una encuesta encargada por el Defensor del Pueblo. Estos resultados arrojan luz sobre el problema que atraviesa la iglesia católica y según Gabilondo, las entrevistas que acompañan la encuesta muestran "impacto devastador" de los abusos y señala que en muchos casos la respuesta ha sido "insuficiente" y "dilatoria". En este sentido, cabe resaltar que algunas archidiócesis cuentan con protocolos de actuación para afrontar estos casos y la última en implantar la suya ha sido la archidiócesis de València.

Concretamente, ha implantado un protocolo en todos sus centros para detectar, evitar y prevenir los abusos sexuales a menores. En el texto de un total de 100 páginas, además de aportar contexto, recomendaciones y pasos a seguir, también se especifican varias señales que pueden dar pistas de que alguien está sufriendo un abuso. En el texto dividen los indicadores en dos categorías: físicas y de comportamiento.

Indicadores de comportamiento

Tal y como recoge el texto, los indicadores de comportamiento son más sutiles y subrayan los que no tienen directa connotación sexual, pueden estar señalando otros problemas diferentes del abuso como malestar por un maltrato, por un divorcio, por la muerte de un familiar. Además, señalan que los que deben alertar más son aquellas "conductas llamativas de talante o ámbito sexual".

  • Comportamientos anómalos y anormalmente llamativos de carácter compulsivo, depresivo, agresivo, defensivo, autodestructivo, adictivo, delictivo o promiscuo.
  • Tendencia a mostrar conductas o a realizar juegos y utilizar lenguajes sexualizados impropios para su edad.
  • Bajo rendimiento escolar y deportivo.
  • Vestirse con varias capas de ropa o acostarse vestidos.
  • Secretismos respecto a amistades, actividades, redes sociales y uso de internet.
  • Exhibición de regalos, dinero y objetos de valor de origen inexplicable o poco creíble.
  • Temor o nerviosismo ante la presencia de un individuo en concreto (el agresor).
  • Tendencia a aislarse y dificultades en la integración en el grupo de iguales.

Indicadores físicos

Por otro lado los indicadores físicos son mucho más fiables ya que apuntan a una alta probabilidad de haber sufrido abuso. No obstante, solo se podrán detectar en caso de que el propio menor lo haya indicado o por exploración de parte de un sanitario. Según la archidiócesis, estas son las señales físicas:

  • Dolor o molestias en el área genital, anal o en los senos o Infecciones urinarias frecuentes.
  • Cuerpos extraños en el ano y vagina.
  • Comportamiento sexual inapropiado para su edad o Embarazo, enfermedades de transmisión sexual.