A priori, unas cañas al salir del trabajo no suponen un consumo peligroso, pero hay que tener cuidado con la cantidad de alcohol que se toma ya que se pueden convertir en bebedores de riesgo.

José Zarco, médico coordinador de intervención en drogas 'semFYC', explica que las personas que están en riesgo son las que beben "cuatro vinos o cuatro cañas de forma diaria en el caso de los hombres o más de dos en el caso de las mujeres o aquellas que concentran el consumo en un día".

Según una encuesta realizada a más de 4.000 españoles, casi el 80% de la población consume alcohol. Pero solo el uno de cada cien percibe su consumo como alto o muy alto. "Cuanto más consume la gente, menos consciente es del riesgo que tiene", explica Zarco.

España, junto a Francia y Portugal es de los países de Europa en los que más se bebe, pero no somos conscientes de la ingesta de alcohol que es perjudicial.

Los mayores en nuestro país son los que beben más a diario, sin embargo, en menor frecuencia pero en mayor cantidad, beben los jóvenes.

Paco Sainero, director de la comunidad terapéutica 'Proyecto Hombre', alerta de que el "objetivo principal de salir" de los jóvenes "se convierte en beber hasta no poder más".

Los expertos aseguran que el alcohol es el causante de más de 200 enfermedades y que produce la muerte de uno de cada siete hombres y una de cada trece mujeres en Europa. "Es una substancia que es capaz de provocar daños a cualquier nivel, digestivo, neurológico o cerebral", sentencia Sainero.

Unas cifras en las que hay que pensar antes de cometer excesos con las bebidas alcohólicas.