España se ha convertido en uno de los países que más cesáreas practica, y es que uno de cada cuatro nacimientos se llevan a cabo de esta forma. Una situación que se debe a múltiples factores.

En concreto, se puede dividir en tres tipos de condicionantes: maternas, fetales o placentarias. "Hay patologías maternas en las que no se permite un parto vaginal porque no es recomendable. Por otro lado, existen las patologías placentarias donde la placenta, por ejemplo, obstruye el paso del niño. También hay patologías fetales, como cuando tenemos triples", explica Juan León, ginecólogo del hospital Gregorio Marañón.

Aunque los protocolos sanitarios difieren mucho entre comunidades autónomas y hospitales y depende de otros factores como la complejidad o el tipo de centro.

"En nuestro país cada vez van siendo más comunes causas como, por ejemplo, las gestaciones múltiples, que incrementan el porcentaje de cesáreas de los hospitales de referencia como el nuestro", indica Juan León.

Por comunidades, en los últimos diez años, solo en Cantabria y Vizcaya han disminuido entre un 8 y 10% los partos por cesáreas, le siguen Tarragona y Teruel que descienden en un 5%. Al otro lado de la balanza se encuentran Álava y Zamora, que son los que más crecen, incrementando un 4 y 3% respectivamente en la última década.

Entre otros factores analizados, cuenta la edad de la madre. Según el Instituto Nacional de Estadística, son el grupo de mujeres de entre 40 a 46 años los que que refieren más riesgos y superan el 40% de las intervenciones de este tipo.

La Organización Mundial de la Salud recomienda que no se realicen más del 10- 15%, porcentaje que España supera con un 25% de cesáreas. Sin embargo, se encuentra por debajo de la media de la OCDe, que señala un 28%. De esta forma, nos situamos por debajo de países como Alemania, Estados Unidos o Reino Unido, mientras que estamos por encima de Francia o Bélgica.