Sólo en una semana Verónica ha recibido numerosas solicitudes de empleo para trabajar en su zapatería. Muchos de ellos tienen estudios superiores de lo que se exige para este puesto, aunque Verónica reconoce que "con toda la cantidad de currículums que te vienen, a la hora de contratar a alguien buscas ya, si tienes donde elegir, a gente que tenga unos estudios más elevados".

De hecho ella, estudió pedagogía. "Había muchos compañeros míos que estaban en el paro o se habían marchado fuera y no me atrevía a dejar pasar la oportunidad de un trabajo estable", explica Verónica.

España está a la cabeza de Europa. El 37% de los graduados trabaja en puestos de menor cualificación, muy por encima de la media europea. Y son más los hombres que ocupan puestos para los que no son necesarios sus estudios.

"El peso de determinadas actividades de servicios, probablemente vinculadas a servicios turísticos o de estas características, probablemente, en mayor proporción que otros países hacen que requiera un número de titulados superiores inferior", afirma Martí Perellada, coordinador general de informe CYD.

Patricia trabaja en una óptica aunque ella termino ingeniería técnica agrícola hace cinco años. "No encontraba de mi trabajo. En Valencia sí que encontraba, pero era de prácticas, con lo cual ninguna empresa me contrataba", explica. Es su ultimo día en la óptica. Quizás en el próximo trabajo esté todavía más sobrecualificada porque lo deja para seguir estudiando.