La mascarilla ya no será obligatoria en el transporte público a partir de febrero. De esta forma, después de casi tres años, España dirá adiós a esta medida que se implantó para frenar los contagios por coronavirus.

La ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha anunciado este jueves que el Consejo de Ministros aprobará el fin de la obligatoriedad de las mascarillas en transportes públicos el 7 de febrero. Los cubrebocas deberán seguir usándose por el momento en centros sanitarios, incluidas clínicas de todo tipo y farmacias.

La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ya había anunciado que el Ejecutivo estaba estudiando el impacto de las medidas, abundando en que la sociedad ya ha dado "distintos pasos" hasta "recuperar la normalidad".

Hasta ahora, la recomendación de la Ponencia de Alertas era mantenerlas por prudencia hasta que acabara la temporada de infecciones agudas, aproximadamente en marzo, y a la espera del impacto que pudiera tener el estallido de contagios en China tras el abandono de la estrategia covid cero. Pero en las últimas semanas se había retomado el debate tras observar la estabilidad de la situación epidemiológica en España, que no se vio alterada con las fiestas navideñas.

Antes de anunciarse esta medida,Fernando Simón quiso dejar claro que debe seguir manteniéndose la prudencia. "El mensaje no es que se vaya a retirar la mascarilla, sino que ahora la población tiene que ser mucho más responsable". "Cuando tenemos síntomas deberíamos utilizarla de manera responsable y si somos grupos de riesgo o vulnerables también", recalcó.

Lo cierto es que eran muchas las personas que se preguntaban cuándo sucedería esto después de que en abril del año pasado se rebajasen las restriccionesrelacionadas con las mascarillas, haciendo que ya solamente fuese obligatorio llevaras en el interior de transportes públicos, aunque no en el andén ni en las estaciones.

De esta forma, el uso de las mascarillas se eliminará casi por completo de todos los ámbitos públicos. Sin embargo, hay que tener en cuenta que en los establecimientos sanitarios, que van desde hospitales, hasta farmacias, pasando por ópticas o clínicas dentales, la mascarilla sí que seguirá siendo obligatoria.