En Italia la mayoría de
las playas son de pago ya que los ayuntamientos otorgan concesiones a empresarios
a cambio de un canon. Una situación que puede dar pie a casos como el de la
playa de 'Punta Canna', en Venecia, donde Gianni Scarpa, el hombre de 64 que
explota este territorio, ha convertido el paraje natural en un monumento en
honor a Mussolini.
Scarpa ha llenado la
playa y sus aledaños de fotografías del dictador y carteles con frases que no
han gustado en Italia. En el camino que lleva a esta playa se pueden leer
frases como "la justicia nace en el cañón del fusil" o "servicio sólo para los
clientes, o porra en los dientes".
También hay perlas que no dejan indiferentes a los bañistas que allí se congregan: "En un país devastado por ladrones institucionales y maleducados, estas son las reglas que hacen falta: orden, limpieza, disciplina y severidad".
Además de imágenes del
dictador también aparecen fotografías que muestran el saludo fascista y una
llamativa frase de Ezra Pound: "Si un hombre no está dispuesto a luchar por sus
ideas, o no valen nada sus ideas o no vale nada él".
Además de la simbología,
el gestor de la playa también lanza mensajes xenófobos a sus clientes: "La
basura humana en el mundo, que es del 50 %, aquí por fortuna no entra".
Después de que la
noticia saltara a los medios a través de un reportaje, la Policía retiró los carteles
y denunció la situación. Ahora una ordenanza del juzgado de Venecia obliga a
Scarpa a "retirar toda referencia al fascismo en carteles, señales o cualquier
otro medio escrito" y también le obliga a "abstenerse de emitir mensajes críticos
contra la democracia".