Latas caducadas desde 2010, sándwiches podridos o envases deteriorados que se vendían con total normalidad. La Guardia Urbana ha detectado y retirado más de 1.900 productos caducados, con fechas de consumo preferente muy desfasadas, o con envases deteriorados que estaban a la venta en un supermercado del distrito del Eixample, en Barcelona.

Según informa la Guardia Urbana, se inspeccionó el local tras unas quejas vecinales por ocupación de la vía pública de unos caballetes publicitarios sin autorización.

Durante la investigación, los agentes encontraron los productos no aptos, de los cuales algunos tenían que ser consumidos incluso antes del fin de 2010, así como también hallaron en el establecimiento deficiencias administrativas, de seguridad y de higiene que podían poner en peligro la salud pública, o el incumplimiento de la normativa de etiquetado.

Los productos retirados están conformados por 81 litros de aceite, 654 unidades de latas o potes de conservas, 180 unidades de productos precocinados, 200 unidades de lácteos, 200 unidades de productos frescos, 100 unidades de especias, 150 unidades de galletas y cereales, 240 unidades de refrescos y bebidas alcohólicas, 14 unidades de comida para animales, 30 unidades de café y te y 60 unidades de helados.

Además de retirar todos los productos, la Guardia Urbana también levantó un acta de inspección con copia para el Instituto de Salud Alimentaria (ISAL).