Según han precisado fuentes de Subdelegación del Gobierno, todos los indicios apuntan a que la caída al pozo y posterior muerte del cazador se debió a un accidente, aunque se mantienen abiertas todas las hipótesis hasta que se conozcan los resultados de la autopsia.
La víctima había salido a cazar y al no regresar a su domicilio sus familiares denunciaron su desaparición. Entonces se activó un dispositivo de búsqueda en el que participaron agentes de la Guardia Civil, vecinos y Protección Civil hasta la localización del cadáver en el pozo.