El amor a una mascota es incondicional, y ese cariño se acentúa cuando además de ser un animal de compañía es también un compañero de vida. Eso es lo que ha experimentado Anatoly Derbenev, un hombre de 70 años en silla de ruedas, con Magnus, un pastor alemán de tan solo 11 meses que le ayuda a empujar su silla y le acompaña allá donde vaya.
La conmovedora historia llega desde la ciudad de Taraz, en el centro-sur de Kazajstán, donde una mujer difundió por redes sociales un vídeo de uno de los emotivos paseos de Magnus.
En el vídeo se puede ver cómo el cachorro empuja activamente la silla de su dueño y le ayuda a sortear obstáculos para, posteriormente, buscar una recompensa en muestras de cariño. "Es más humano que las personas", ha declarado Antoly Derbeneval a la agencia rusa 'Ria Novosti'.