El embalse de Barrios de Luna, en León, presentaba hace unos meses una estampa prácticamente desértica provocada por la sequía. En noviembre, el embalse llegó a estar a sólo al 4% de su capacidad. Un mes después, la tierra se cubría de nieve. Pero ahora, tras las lluvias de los últimos meses, se encuentra al 90%.

"Tras una larga situación de bloqueo, frentes y borrascas ya pueden cruzar el país y dejar fuertes lluvias. Además, como han subido las temperaturas se produce el deshielo, y toda esta combinación hace que los embalses ya presenten este buen aspecto", explica Marc Redondo, periodista de laSexta Meteo.

En Portomarin, Lugo, la falta de precipitaciones hizo emerger ruinas de antiguos pueblos. Hasta allí se acercaban vecinos y cada vez más turistas. Unas rutas imposibles de hacer ahora porque el embalse de Belesar, que está casi al 93%, ha vuelto a inundar la zona. Estos contrastes se repiten en pantanos de todo el país.

En el de Torre del Águila, en Sevilla, la situación hace unos meses no tenía nada que ver con la actual, repleta de agua. Sin embargo, aunque algunos embalses rozan su capacidad máxima, todavía hay zonas críticas. "Normalmente, las cuencas internas de la península y las de la costa mediterránea suelen presentar valores más bajos que los del resto del país. En la zona mediterránea no llueve tanto como en puntos del norte y noroeste", apunta Marc Redondo. La reserva hidráulica ha repuntado en las últimas semanas y se encuentra casi al 69% de su capacidad.