"La justicia es culpable de lo que ha ocurrido", gritan frente a las puertas del juzgado. Es la rabia de la primera víctima de Tomás Pardo. El conocido como 'violador de Martorell' fue condenado a 26 años de cárcel en 2004 por pegarle una paliza a ella y por violar a otra mujer.

Pero 15 años después, ella no entiende que la justicia le concediera un permiso en 2016. A Tomás Pardo se le ha juzgado ahora por violar y apuñalar a otra mujer durante esa salida. "La última víctima está está destrozada. Casi la mata; la segunda víctima está fatal y a mí casi me mata", ha explicado Montse, agredida por Pardo en 2002.

Tomás Pardo ha reconocido los hechos: secuestró a la joven a punta de navaja, la agredió sexualmente y poco después le asestó cinco puñaladas. La anterior víctima de Pardo ya advirtió en su momento que le veía capaz de reincidir: "Lo he dicho siempre: lo volverá a hacer. Yo estuve con él muchas horas y lo volverá a hacer. Él disfrutó".

Montse y otras mujeres han acudido al juicio para protestar y para arropar a la última víctima, que ha tenido que declarar tras un biombo: "Estoy temblando, le he visto la cara y ha sido terrible volverle a ver". La Fiscalía pedía para Pardo 70 años de prisión, pero las partes han llegado esta mañana a un acuerdo de conformidad. El juez decidirá ahora qué pena le impone.