"No he matado a nadie" son las únicas palabras que ha pronunciado hasta ahora el 'rey del cachopo'. Ha sido detenido como presunto autor de la muerte de su novia, Heidi Paz Bulnes. Ha estado en la jefatura de la Policía nacional de Zaragoza, allí le han leído sus derechos y le han hecho una prueba de ADN.

Su abogado, Javier Notivoli, insiste en que él asegura que es "totalmente inocente".

Pelo rapado, barba canosa y mucho más delgado, nada que ver con el Cesar Román de las fotografías que usaba la Policía para buscarle. De ellas, no queda ni siquiera el nombre, ahora se hacía llamar Rafael Rujano.

Llevaba desaparecido desde agosto y trabajaba como cocinero en un restaurante sin generar ninguna sospecha. "En ningún momento podíamos pensar que fuera malo, llevaba una vida normal", asegura en la cadena SER el dueño del restaurante 'Casa Gerardo'.

La Policía emitió una orden de búsqueda y captura contra él, el torso que encontraron dentro de una maleta en una nave de Usera, en Madrid, era de Heidi. El ADN lo confirmaba y según el periódico El Mundo, la Policía habría identificado unos mensajes de móvil en los que César Román amenazaba a su pareja por una supuesta infidelidad.

Fue la dueña del bar la que finalmente reconoció a su cocinero en la televisión. "Me quedé mirándolo y caí en que era mi cocinero", afirma Raquel Contreras.

César Román pasará a disposición judicial en Zaragoza. Será la juez que lleva su caso en Madrid, la que deba pedir su traslado a la capital.