Este fin de semana los móviles arden. Y es que los smartphones avanzan terreno en las compras online y se convierten en la gran herramienta de compra. Este Black Friday el 30% de las compras se han hecho desde el teléfono.

Pero también arde en las tiendas porque empezamos a pagar también con el móvil. "Al final me resulta más fácil porque el móvil lo llevo siempre encima, lo llevo en el bolso o en el bolsillo del pantalón, lo saco y con la huella dactilar pago", cuenta una mujer.

Se está convirtiendo en una forma de habitual de pago. En España, en solo tres años, esta forma de pago ha aumentado un 48%. Los expertos afirman que la seguridad en las aplicaciones bancarias va calando en el consumidor: "A día de hoy ya hay un 19% de los usuarios que utilizan su móvil como medio de pago, su app bancaria para pagar, porque para ellos la seguridad es un elemento clave", asegura Juan Manuel Rial, director de Desarrollo de Negocio del Banco Santander.

"Desde OCU recomendamos ser un consumidor inteligente, que es el que planifica sus compras, compra lo que necesita, las anticipa y compara precios"

Así, los móviles facilitan las compras, tanto online como en las tiendas, y eso tiene sus peligros: la inmediatez hace que compremos más cosas y menos necesarias. "Desde OCU recomendamos ser un consumidor inteligente, que es el que planifica sus compras, compra lo que necesita, las anticipa y compara precios. El móvil es un buen instrumento para ello pero ojo porque también se puede hacer un mal uso", advierte Enrique García, portavoz de la OCU.

Por eso y porque tenemos por delante todavía varios días de ofertas, debemos recordar la pregunta clave: ¿Necesitamos todo lo que hemos comprado? Si no lo tenemos claro, quizás es mejor dejar estos días el móvil a un lado.