"Os pido en nombre de mi hijo que lo que tiene que inundar ahora mismo España son los mensajes de esperanza y cariño que había hacia Gabriel y ese movimiento de buenas personas y no la rabia y el odio", ha dicho Patricia Ramírez a través de un audio remitido por los portavoces familiares a los medios.

Dice entender que ese "odio" sea la reacción hacia la presunta autora de los hechos, "una persona que no es persona", aunque pide que "no se la nombre, que no se quede en la retina, sobre todo de los niños que han dibujado los pescaítos, de los abuelos y de cada persona que está en su casa".

"Que se quede el amor y que mi pescaíto ya está nadando hacia el cielo y que está bien, a él le gustaría que esto terminara con un mensaje positivo y no con uno negativo", ha añadido.

Patricia Ramírez ha agradecido su labor a los voluntarios y profesionales que durante días han buscado a su hijo después de que desapareciese el 27 de febrero en Las Hortichuelas de Níjar (Almería), así como a todos los que le han "mandado mensajes de amor uno tras otro" desde lo más "profundo" de su "corazón".

Por otro lado, ha lamentado que se esté utilizando su imagen y su nombre en páginas de Facebook para "ganar seguidores". "Hasta ahora no he aparecido en ningún sitio con mensajes personales, me parecía positivo. Aunque cogieran fotos mías sin permiso, pensaba que era todo para sumar pero mi hijo ya se ha ido y hay gente creando perfiles, hablando de mi dolor. Yo no he sido. El día que lo haga saldré con mi foto y diciendo lo que tenga que decir", ha apuntado.

Asegura que le "duele en el alma" que haya personas que hagan esto en este momento y les pide que "reflexionen y miren sus corazones" porque la situación es lo bastante difícil como para además ver que "alguien pone palabras en tu boca que no son las tuyas".