La Guardia Civil ha trasladado al asesino confeso de Nelea, la joven que desapareció en Vinaròs el pasado febrero, desde los juzgados hasta la casa que compartía con la víctima para realizar una reconstrucción de los hechos.

Un fuerte dispositivo judicial rodeaba la vivienda, que podría ser el lugar donde se produjo el crimen. El juez ha ordenado la reconstrucción tras tomarle declaración al joven, al que se prevé trasladen también al descampado donde apareció el cadáver de la joven, enterrado y con signos de violencia.

El delegado de Gobierno ha confirmado que el caso sigue abierto, investigando la implicación exacta de los otros dos detenidos, que junto con el autor confeso, han pasado a disposición judicial.

"Bien por participación, bien por encubrimiento, vamos a determinar en qué grado, si es que ha habido participación, lo hayan podido hacer estas personas", indicó Juan Carlos Fulgencio, delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana.

El novio de la víctima, de 22 años, confesó los hechos y dónde estaba enterrado el cuerpo de Nelea tras ser detenido en casa de sus padres el pasado sábado en Ulldecona, Tarragona.

Los vecinos de esta localidad están conmocionados y han convocado cinco minutos de silencio en memoria de la víctima. Muestras de condolencias que se han repetido en Valencia y Vinaròs para condenar este último caso de violencia machista.

"Es más necesario que nunca que los que creemos que esta es una verdadera lacra social tengamos que seguir poniendo todos nuestros medios", ha manifestado el alcalde de la localidad castellonense, Enric Pla.