Tras varios meses de investigaciones, la Guardia Civil ha detenido a tres personas y ha pedido la extradición de una cuarta que se encuentra en Suiza en relación con el asesinato del concejal de Izquierda Unida en Llanes Javier Ardines.

La Guardia Civil sospechaba desde el primer momento que el crimen podía tener una motivación pasional, pese a que en los primeros días se especuló con otros móviles para el crimen. Las declaraciones de la viuda de Ardines fueron muy importantes para que los investigadores tomaran esta vía.

A primer hora de la mañana de este miércoles se espera que los agentes practiquen un registro en el domicilio de Pedro Nieva, presunto inductor del crimen, en el chalet que posee cerca del domicilio de la víctima. En un traslado, el acusado declaró ante los agentes: "No quise matarle, solamente quise darle un susto".

El inductor es el marido de la prima de la mujer de Javier Ardines. El político y esta mujer mantenían una relación sentimental al margen de sus respectivos matrimonios y el marido de la prima fue quien presuntamente encargó el asesinato a unos sicarios.

Los detenidos pasarán a disposición judicial en los próximos días, ya que la Guardia Civil quiere afianzar bien las pruebas que puedan existir contra ellos.