Durante el miércoles, las lenguas de fuego se extendían sobre las laderas de Monterrei, el humo llegó a cubrir el cielo de todo el municipio. Las llamas se aproximaron hasta la carretera A-52, aunque no fue necesario cortarla.

El viento fue favorable y no supuso ningún obstáculo. Este jueves el fuego continúa avanzando sin control y se extiende hasta Oimbra, ya son más de 100 hectáreas arrasadas.

Durante las labores de extinción un agente forestal ha tenido que ser trasladado al hospital al resultar herido. Varios medios aéreos continúan trabajando.

Los vecinos de la zona tienen miedo de perder sus viñedos y sus producciones de abejas. Los investigadores creen que fue intencionado, ya que se ocasionó muy cerca de la autovía y con viento favorable.