Se llama Iker, tiene 5 años y una parálisis cerebral que no le permite andar pero si cumplir su sueño que según dice es "ayudar a los demás". Eso es lo que ha hecho con este otro niño, Pepe, aquejado de una enfermedad mitocondrial tan rara que solo la padece él en España: "Tiene una mutación en un gen que la ha aportado tanto el padre como yo y es un gen que hasta ahora nadie ha estudiado", explica la madre de Pepe, Dácil Alemán.

No se conocen en persona y les separan 1.900 kilómetros, de Toledo a Gran Canaria, pero Iker escuchó a sus padres hablar del problema de Pepe, decían que la familia del niño canario necesitaba dinero para financiar un proyecto que estudiase el origen de lo que le pasa al niño e Iker lo tuvo claro. "Llevé el dinero al banco", nos cuenta Iker.

Sus padres grabaron en vídeo el momento en el Iker abría su hucha y lo compartieron en sus redes sociales sin imaginarse que ese gesto iba a disparar las donaciones.

El proyecto que investiga la enfermedad de Pepe, dirigido por Julio Montoya, catedrático de Bioquímica de la Universidad de Zaragoza necesitaba 6.000 euros, ya lleva 24.000. Pero el objetivo de Iker y su familia es más alto: "Lo ideal sería llegar hasta los 60.000 euros para que por lo menos tengan para los primerso tres años de investigación", nos dice Beatriz Herranz, madre de Iker.

Iker tiene claro que su amigo debe ponerse bueno y por eso nos explica lo que hay que hacer: "Que den dinero a Pepe ahora mismo que lo necesita mucho".

Y Pepe, a pesar de no poder hablar le agradecerá siempre a su amigo la ayuda que le está brindando