Las chimeneas de la fábrica de Ence, que produce pasta-papel, llevan desde los años 60 creando polémica en la Ría de Pontevedra. Ahora, esta polémica ha quedado reflejada en el documental 'Savia nova'.
La fábrica de pasta de papel de Ence, se levantó en un terreno de dominio público marítimo-terrestre y a pie de mar, y ocupa 600.000 metros cuadrados de uno de los ecosistemas más productivos del mundo.
Iván Pérez, graduado en Ciencias Ambientales y Presidente de la Mancomunidad de montes de Pontevedra, explica que "en el dominio marítimo-terrestre es para empresas que necesitan ese entorno, como acuicultura o un astillero de barcos, no una fábrica de papel".
Según sus detractores, la fábrica emite gases y humo casi de forma continuada y no hay estudios sobre como afectan a la salud de la población. "¿Por qué no hay estudios?, pues porque curiosamente ardieron los 500.000 expedientes médicos que existían, y esto dificulta tener un registro histórico", comenta Pérez.
Los expertos consultados por 'Savia Nova' dicen que el modelo forestal que ha implantado ENCE, basado en el eucalipto, no es sostenible. Rafael Zas, científico del CSIC, critica esto: "No conozco ninguna zona forestal tan degradada como esta, el eucalipto coloniza todo de forma desordenada".
La concesión a la fábrica en esta ubicación, rica en bancos marisqueros, caducó el año pasado, pero el gobierno en funciones de Rajoy la amplió 60 años más. Por su parte, ENCE asegura que ha trabajado en la reducción de gases contaminantes hasta dejarlos casi a cero.
"Hemos conseguido crear una fábrica que genera riqueza y que tiene un respeto al medio ambiente absoluto", defiende Antonio Casal, Director territorial de ENCE-Galicia, a lo que añade: "cumplimos todos los requisitos para permanecer en Pontevedra, ecologistas y medioambientales".
La fábrica genera 5000 empleos directos e indirectos y no contemplan un traslado, como explica Casal: "trasladar ENCE es imposible, no hay otra ubicación, o permanencia o cierre".
Ana Cedeira, presidenta del Comité de Oficinas Centrales de Pontevedra, también ha defendido la posición de la fábrica: "No se puede trasladar, esto no es un juguete al que se le ponen unas ruedas y se mueve a otro lugar"
Los ecologistas y la asociación por la defensa de la ría, han presentado dos recursos ante la audiencia nacional para impedir que la fábrica siga en la ría otros 60 años. Eso sí, no quieren que ENCE se vaya de Galicia, pero creen que no debe estar a pie de mar.