Es el mito más habitual al que se enfrentan a diario los pediatras. Cada vez más padres llegan a sus consultas con miedos generados a través de la red.

Los mitos sobre vacunas y alimentación son los más comunes. "Parece que cuando una cosa sale en Internet sea palabra de Dios. Es un problema muy grande porque puede llevar a tratamientos que pueden ser perjudiciales para el niño".

El doctor Google está cogiendo ya más peso incluso que el doctor de cabecera, por rapidez e inmediatez. Los enfermos lanzan preguntas al aire, en foros donde cualquiera puede opinar.

El sueño de los niños es otra de las preocupaciones más consultadas en la red, lo asegura una de las páginas más consultadas de pediatría en Internet.

El cáncer es otro de los protagonistas de estos bulos. Detrás de casi cualquier síntoma puede haber un cáncer y para tratarlos hay un sinfín de falsos remedios.

"Aparte de la información que hay en Google, hay mucho desaprensivo que utiliza estas plataformas para colar tratamientos y pseudociencias y, lamentablemente, algunos pacientes caen en ellas", explica Begoña Barragán, presidenta del Grupo Español de Pacientes con Cáncer (GEPAC).

Se calcula que ocho de cada 10 personas ya recurren al doctor Google y casi todas estas consultas acaban con el paciente sintiéndose mucho más enfermo de lo que estaba.