El Delta del Ebro prácticamente ha desaparecido tras el paso de la borrasca Gloria. La estampa es desoladora, tal y como se puede ver en la grabación realizada a vista de pájaro. La borrasca ha dejado 3.000 hectáreas de arrozales engullidas por el agua, que ha conseguido penetrar hasta tres kilómetros de tierra adentro.
Las intensas lluvias, le fuerte viento y las enormes olas de casi nueve metros de altura han dejado la gran parte de los campos anegados. Los agricultores todavía tendrán que sacar el agua de la zona y limpiar la tierra de la sal que ha quedado en ella.
Gerardo Monet, presidente de la Federación del Moluscos del Delta del Ebro, ha asegurado que hasta el momento hay dos millones de euros en pérdidas solo en Bahía Norte. En total se estima que hay más de 300.000 kilos de mejillones perdidos y otros 100.000 millones de ostras.
Toda la zona está irreconocible, y así puede verse en la comparativa entre la zona el 15 de enero y tan solo seis días después mediante una imagen de satélite. La descomunal fuerza del agua dejaba imágenes insólitas, como la de un atún muerto en pleno paseo marítimo de l'Ampolla. El Ayuntamiento de Deltebre estima que las pérdidas económicas alcanzan los diez millones de euros.
