Juan Miguel Sánchez es uno de los pacientes de coronavirus al que se le trató con un corticoides para atajar su infección cuando aún se desconocía el estudio de Oxford que apunta ahora a sus beneficios en pacientes graves.

Juan Miguel Sánchez comenzó a sentir síntomas el 14 de marzo, cuando detectó que tenía fiebre y comenzó a tener problemas respiratorios. Tras acudir a urgencias la enfermedad se complicó. Lo que parecían ser diez días se ingreso se duplicaron y empezó a empeorar.

"Estaba con mascarilla de oxigeno valorando si iba a UCI o no", ha explicado el paciente, que fue tratado en el Hospital San Cecilio de Granada, donde el doctor José Luis Callejas comenzó a aplicar un fármaco muy similar a la dexametasona.

José Luis Callejas ha descrito esos días como "muy duros". El doctor, que es muy amigo de Juan Miguel Sánchez, decidió aplicarle corticoides a pesar de que la OMS lo desaconsejaba en aquel momento: "Lo quiero como un hermano y tiene cojones que justo el que se pone malo es él".

Así, Juan Miguel fue de los primeros pacientes a los que se le puso los pulsos de corticoides. Concretamente se le aplicó metaprednisolona, del mismo grupo farmacológico y equivalente a la dexametasona. Y es que un ensayo clínico de la Universidad de Oxford ha confirmado que salva vidas de enfermos graves.

Sin embargo el doctor ha reconocido que hubo un momento en el que se puso en lo peor, cuando 'Juanmi', como le llama él, no era capaz de mantenerse en pie para que le hicieran la cama. Incluso preparó a su familia y amigos, alertándoles de que la situación era verdaderamente crítica.

Pero Juanmi salvó la vida, y ahora no tiene más que palabras de agradecimiento a su mejor amigo, porque además de eso se ha convertido en su ángel de la guarda.