Reciben amenazas e insultos

La dura situación que viven las parejas interraciales en Torre-Pacheco: "Agreden tanto a españoles como a marroquíes"

Los detalles Una joven, cuya pareja es marroquí, cuenta que le han llegado a perseguir en dos coche. "No hemos hecho nada malo a nadie", ha destacado, señalando que es gente de fuera que quiere "romper un pueblo".

V-FAMILIAS INTERRACIALES
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La situación que se está viviendo en Torre-Pacheco ha generado un clima de mucho miedo y también de odio, especialmente hacia las parejas interraciales compuestas por españoles y migrantes.

Ahora, denuncian que están recibiendo insultos y agresiones físicas en la calle, confesando que temen ir a trabajar pero que, pese a todo, no quieren quedarse callados ante lo que está sucediendo.

Jessica, casada con un marroquí, cuenta que su marido prefiere no salir de casa. "Prefiere mantenerse alejado par evitar provocaciones", ha explicado, y es que llevan días recibiendo amenazas e insultos.

"Las personas que estamos con un marroquí o que nos llevamos bien con ellos, estamos recibiendo insultos", ha confesado. Unas amenazas que en algunos casos han llegado a convertirse en agresiones.

Jessica cuenta que estas agresiones se producen tanto a españoles como a marroquíes. "A las mujeres les arrancan el velo y les escupen en la calle", ha contado.

Por otro lado, otra joven cuyo novio también es marroquí y que al principio ocultaba su rostro, cuenta que fueron a una manifestación que, a priori, era pacífica y tuvieron que marcharse porque comenzaron a insultarles y a tirarles cosas. "Tuvimos que salir corriendo", ha destacado.

Ahora, Sofía ha decidido que ya no quiere ocultarse. "No hemos hecho nada malo a nadie ni tenemos nada que esconder", ha defendido. En total, lleva cinco años con su pareja y los dos son de Torre-Pacheco.

Un día, cuando salía del trabajo se encontró con que dos coches comenzaron a "perseguirle". Tanto la fotografía de ella como la de su pareja está en redes sociales y ambos han recibido amenazas tan graves que han optado por cerrar sus cuentas.

"Son gente de fuera que ha venido a romper un pueblo", ha asegurado, confesando que espera que pronto se pueda recuperar la convivencia en esta localidad murciana.