En agosto de 2012 un matrimonio del sur de Reino Unido ganaba 149 millones de euros del premio del Euromillón, el segundo mayor de la historia del país. A pesar de la fortuna, la felicidad no ha agraciado a la pareja, que ha acabó divorciándose.

Gillian Bayford, la mujer que ganó el suculento premio, recibió el cheque junto a su marido, Adrián, entre besos y caras de felicidad, una felicidad que no duraría: sólo 15 meses después de esa escena, la mujer se divorció y abandonó Suffolk, ciudad donde vivía, para volver a su Escocia natal.

Hasta allí se marchó con sus dos hijos y creó un fondo inmobiliario con una inversión millonaria para adquirir viviendas para alquiler. También abrió un negocio de hostelería que tuvo que cerrar con pérdidas de casi 150.000 euros.

En esa época conoció a un nuevo amor: Gavin Innes, un hombre que trabajaba ayudando a hombres víctimas de violencia doméstica. Todo volvió a oscurecerse cuando él la denunció por agredirle en tres ocasiones entre agosto y octubre de 2017. A pesar de que no ha comparecido todavía en los juzgados por este caso, su abogado mantiene que es inocente.

Tras esta relación fallida, Gillian volvió a casarse seis años después del premio. Esta vez lo hizo con un hombre que fue compañero suyo en el colegio y que estuvo en la cárcel por robar 15.700 euros a una cadena de supermercados.