Pablo Romero, hijo de un asesinado por ETA en el año 1993, ha cargado con dureza contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en mitad de una dura campaña electoral en la que el grupo terrorista ha sido una de las armas arrojadizas del PP contra las formaciones del Gobierno.

En concreto, Romero ha respondido a unas declaraciones de la presidenta en las que afirma que "Bildu no es heredero de ETA, sino ETA": "ETA está viva, está en el poder, vive de nuestro dinero, quiere destruir España", ha añadido la presidenta de la Comunidad de Madrid.

Palabras que ha reprendido con contundencia el periodista: "Estimada Isabel Díaz Ayuso: deje ya de decir barbaridades. Ahórreme el dolor de ver que ETA sigue viva en su boca. Se lo pido por favor, casi por caridad, si de verdad quiere respetar a los afectados por el terrorismo que luchamos por la memoria y la justicia".

Consuelo Ordoñez, presidenta del Colectivo de Víctimas del Terrorismo, ha suscrito sus críticas: "Esto lo dice Pablo, a quién ETA asesinó a su padre. Y lo suscribo yo, palabra por palabra. Es la banalización en estado puro. No respetan a los muertos, van a respetar a sus familiares...", ha lamentado.

Las polémicas afirmaciones de Ayuso han sido rechazadas incluso por el portavoz de campaña del PP, Borja Sémper: "La democracia española derrotó a ETA" ha afirmado Sémper en declaraciones a la prensa en Santiago, donde ha trasladado un mensaje diferente al de la su compañera de partido. "Aceptamos con naturalidad democrática que Bildu esté en las instituciones", ha indicado ante los medios.

Con algún 'pero'

La Justicia ratifica que llamar "gilipollas" a un jefe no es motivo de despido

Así lo ha ratificado el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM). Eso sí, enfatiza que el insulto debe ser "concreto y aislado" en un contexto determinado, como el caso de un empleado al que le pidieron que se quedara a una reunión al terminar su turno.