El titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Eduardo López-Palop, interrogará a los inspectores en el marco de la investigación de las circunstancias de la muerte de cinco jóvenes a consecuencia de una estampida humana en una fiesta de Halloween en el recinto Madrid Arena.

María José Siñeriz, abogada de la familia de Cristina Arce, una de las víctimas de la tragedia, ha explicado que el jefe de la Inspección de Planificación y Coordinación de la Policía Municipal, Óskar de Santos, emitió la orden de servicio número 4036/12 para el evento del Madrid Arena con un nivel de riesgo "medio", a instancias del inspector jefe de la Policía Municipal, Emilio Monteagudo.

Óskar de Santos remitió la orden de servicio, fechada el 26 de octubre de 2012, al jefe de la Inspección Territorial I, Gerardo del Rey, al Área Operativa de Comunicaciones, a la Concejala de Seguridad y Emergencias y al inspector jefe de la Policía Municipal.

En la orden, que incluye una serie de datos generales sobre la fiesta, figuran el subdirector de Seguridad de Madrid Espacios y Congresos, Rafael Pastor, como peticionario, y la Inspección Territorial I, como encargada del operativo policial.

Gerardo del Rey tendrá que explicar cómo le comunicó la orden de servicio y el nivel de riesgo del evento a la jefa de la Policía Municipal de la Unidad de Moncloa-Aravaca, Cándida Jiménez, responsable del operativo policial. Jiménez dijo en sede judicial que recibió la orden de servicio el 30 de octubre de 2012 y que nunca le comunicaron el cambio de nivel de riesgo de la fiesta de medio a alto.

Siñeriz ha precisado que los testigos tendrán que aclarar cómo se hizo la orden de servicio, cómo se tramitó, cómo se ejecutó, cómo se valoró el nivel de riesgo de la fiesta y qué pasó del 26 al 30 de octubre de 2012.

La letrada se ha mostrado sorprendida por las declaraciones del abogado del Ayuntamiento de Madrid, Luis Rodríguez Ramos, en las que consideró "aberrante" la estrategia de las acusaciones particulares de "poner en la picota" a la Policía Municipal y a sus mandos. Ha puntualizado que Rodríguez Ramos es el abogado del Consistorio madrileño y no de Emilio Monteagudo, que tiene su propio defensor, al tiempo que ha opinado que "lo aberrante es que tengamos cinco muertos y, hasta ahora, nadie quiera asumir su responsabilidad".