Wally, la ballena gris del Pacífico avistada en España, ha sido perdida de vista en las últimas horas. Este pasado jueves fue la última vez que se la vio en las costas de Mallorca, flotando, moviéndose despacio y arrastrando su cuerpo.
Chema, experto de la 'Fundación Tursiops', asegura que debería "estar navegando hacia el norte", hacia su hábitat natural, que es el Pacífico. Sin embargo, indica que "al encontrarse con las costas de Francia", el animal "siguió bajando" y por eso fue avistado en Valencia.
Quienes tratan de localizar a Wally no descartan que ya haya muerto. Esto complicaría su localización, ya que se pierde el rastro por completo: "Generalmente suelen hundirse y aparecer en el mar a lo largo de los días, cuando comienza el proceso de descomposición y el cadáver empieza a flotar", ha evaluado José Luis Crespo, experto de la Fundación Oceanogràfic de Valencia.
El mismo apunta más allá: valora que las especies carroñeras del mar podrían hacer que desapareciera y que no volviésemos a verla "nunca más". El principal objetivo de los investigadores es que no sufra. Si se queda varada, a Wally le costaría mucho respirar y su agonía podría ser muy dolorosa. También quieren estudiarla para comprobar si pertenece a la población más abundante del Pacífico, de más de 20.000 ejemplares.
Gorka Ocio, experto en cetáceos, cree que es posible que la ballena forme parte de esta población pero que se sabrá "cuando se tengan los resultados genéticos de las pruebas que han hecho los franceses cuando recorrieron esas costas". Quieren entender qué le pasó, y que la irrupción de Wally en nuestras vidas sirva para concienciarnos.
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