Toneladas de plásticos en el mar han impulsado multitud de campañas antiplástico, un material que, con la crisis del coronavirus, reinvindica su utilidad.

"Los plásticos son versátiles y ligeros, resistentes y seguros", defiende Luis Cediel, portavoz de esPlástico. El material se utiliza en mascarillas, guantes, batas impermeables o respiradores.

En el sector alimentario, se utiliza para cubiertos, productos preparados. Un mayor consumo que se traduce en un mayor reciclaje. El sector aboga por un consumo responsable, también de los productos sanitarios como guantes o mascarillas. En el estado de alarma, el reciclaje en el contenedor amarillo ha subido un 15%, pero no es ahí donde se tiran estos productos.

“Es importante que cuando acabe su vida útil lo depositemos en el contenedor resto o en una papelera. Nos preocupa que acaben abandonados en la naturaleza”, afirma Miguel Muñoz, coordinador del Proyecto Libera en SEO/Birdlife. Julio Barea, responsable de la campaña de residuos de Greenpeace España, recuerda que “no son reciclables” y que “no se pueden arrojar en el cubo amarillo”.

Preocupa también el aumento de productos de usar y tirar. En ese sentido, Canarias será la primera región en acabar con parte de esos plásticos, intentando implantarla en enero de 2021. Quedarían fuera guantes y mascarillas, fomentándose el uso de las reutilizables para cuidar de nuestra salud y, a la vez, de la de nuestro planeta.