Las condolencias y muestras de solidaridad con los familiares y amigos de Marta Calvo se han sucedido este jueves en varios puntos de la Comunitat Valenciana mientras la Guardia Civil sigue buscando los restos de la joven, a la que el detenido por el crimen confesó haber descuartizado.
En Estivella (Valencia), la localidad natal de Marta, se ha convocado una concentración de repulsa a la que han acudido cientos de vecinos, muchos de ellos con velas, que han abarrotado una céntrica plaza del pueblo tras una pancarta que rezaba "Ni una menys" (ni una menos).
Los miembros del Ayuntamiento, encabezados por el alcalde, Rafael Mateu, han recordado los puntos aprobados en el pleno extraordinario celebrado tras conocer la confesión del sospechoso y se ha leído un manifiesto, en el que se ha explicado que esta vez "la desgracia" les ha "tocado de cerca" porque Marta Calvo es "hija de este pueblo", que estuvo pendiente de su suerte desde que desapareció el pasado 7 de noviembre.
Una chica, han dicho, "alegre, libre y buena, con toda la vida por delante y que ha sido víctima de una asesino" con el que se encontró "en las redes sociales fortuitamente".
En Manuel, el pueblo a 100 kilómetros de Estivella en el que residía el ahora detenido y donde se perdió la pista a la joven, también se ha leído un manifiesto. "Manuel es un pueblo de paz y rechazamos cualquier tipo de violencia, aquí y en cualquier parte del mundo", ha asegurado la alcaldesa, Purificación Atienza, que ha mostrado la solidaridad del municipio con la familia.
Allí, docenas de personas se han concentrado a las puertas del Ayuntamiento con velas y flores, junto al lema "Vivas nos queremos", para mostrar su repulsa ante el crimen y su solidaridad con la familia.
Asimismo, los concejales del Ayuntamiento de Sagunto (localidad muy cercana a Estivella), así como funcionarios y representantes de colectivos ciudadanos han guardado un minuto de silencio en señal de condena y repulsa por este crimen.
Por su parte, la vicepresidenta del Consell y consellera de Igualdad, Mónica Oltra, ha afirmado que este crimen debería considerarse violencia machista porque "forma parte de esas agresiones a las mujeres por el hecho de ser mujeres", a pesar de que la Ley de Violencia de Género solo contemple como tal la ejercida sobre las mujeres "por parte de quienes sean o hayan sido sus cónyuges o de quienes estén o hayan estado ligados a ellas por relaciones similares de afectividad".
Prosigue la búsqueda de los restos
El detenido por el crimen, Jorge Ignacio P.J., de 38 años, ha sido trasladado a la Comandancia de la Guardia Civil de Valencia, donde los especialistas en homicidios tratan de encontrar los restos de la joven, a la que, según confesó al entregarse, habría descuartizado.
Según su testimonio, tiró después las partes del cuerpo por diversos contenedores, aunque por el momento no hay constancia de que los investigadores hayan encontrado todavía ningún resto.
Para la tarde de este jueves estaba prevista la reconstrucción de los hechos en la vivienda que el sospechoso tenía alquilada en Manuel, pero fuentes de la investigación han señalado que finalmente tendrá lugar cuando el detenido pase a disposición judicial.
Su traslado a dependencias judiciales, concretamente ante el Juzgado de Instrucción número 6 de Alzira (Valencia), está previsto a lo largo de este viernes después de que el miércoles declarara durante más de cinco horas en el cuartel de la Guardia Civil en Carcaixent.