Contradicciones en las declaraciones
"Lo dije y lo seguiré diciendo": la viuda del ganadero asesinado en Ribadesella mantiene su relato a pesar de la denuncia de su hermana
Los detalles La viuda reitera su inocencia y señala a la familia del ganadero ante un posible móvil económico para el asesinato. Además, ha aclarado que no estaba casada, por lo que no sería heredera universal.

Resumen IA supervisado
La viuda del ganadero asesinado en Ribadesella sostiene que fueron dos encapuchados quienes lo mataron, aunque su hermana la acusó de mentir. María del Mar defiende su inocencia y aclara que no estaba casada con el fallecido, por lo que no es heredera universal. La herencia es clave en la investigación, que baraja un posible móvil económico. La relación entre la pareja era tensa debido a problemas económicos y un episodio violento. La hermana del fallecido niega haber señalado a la viuda y solo amplió detalles en su declaración. La Guardia Civil descarta la teoría de los encapuchados por falta de evidencia, y se espera el informe toxicológico y la autopsia para esclarecer los hechos.
* Resumen supervisado por periodistas.
"Fueron dos encapuchados, lo dije, lo digo y lo seguiré diciendo". La viuda del ganadero asesinado a golpes en Ribadesella sigue manteniendo su versión inicial y lo hace después de que les contáramos cómo su hermana, ante la Guardia Civil, la señaló. La acusó de haber mentido.
María del Mar reitera su inocencia. Además, ante la prensa que se agolpa delante de su casa, ha querido aclarar cuál es su situación legal respecto a la herencia que podría recibir, o no, tras la muerte del ganadero. Porque esta herencia es una pieza importante en el puzzle de la investigación que debe esclarecer el crimen del ganadero de Ribadesella.
Mientras tanto, la viuda insiste y se reafirma en sus palabras sobre lo ocurrido la noche del suceso. Repite la que fue su primera versión: hubo un intento de robo y lo mataron dos encapuchados. Esto es lo que ha contado desde el mismo día del crimen y es un relato que mantiene su inocencia.
Además, la viuda asegura este jueves que no cree que su hermana la haya señalado.
Fuentes cercanas a la investigación han confirmado a laSexta que la pareja tenía problemas económicos. Había quebrado una empresa de leche y les había dejado a deber muchas facturas. En este ambiente, estas mismas fuentes, cuentan que la relación entre ellos no era buena. Es más, nos han relatado cómo, incluso, una patrulla de la Guardia Civil se presentó en la casa por un episodio violento entre ellos. Eso sí, no denunciaron.
No estaban casados. ¿Quién hereda entonces?
Otro de los temas que ha querido aclarar la viuda del ganadero es que no estaba casada con el fallecido. Es decir, María del Mar no sería la heredera universal de sus bienes.
Una de las hipótesis que se maneja en la investigación es que el móvil del crimen haya sido económico. Que alguien, del entorno cercano, quisiese quedarse con el patrimonio de Toño. Ante esta cuestión, ella ha dejado muy claro que no estaba casada, pero que sí habían iniciado unos trámites. Asegura que se iban a casar en diciembre.
Por ello, la viuda señala de algún modo a la familia del ganadero, que serían los herederos por ley. Aunque si se hubiera celebrado la ceremonia de la boda, el reparto de la herencia sería otro.
Lo que ella cuenta es que Toño tenía problemas con su hermana, por una vivienda contigua a la de la granja dónde ellos vivían. Una vivienda que heredan los dos: Toño y su hermana, y que mantenía a los dos hermanos con discusiones frecuentes.
¿La hermana se desdice?
Ahora, desde el entorno de la hermana echan en freno. En estos momentos, lo que dicen es que no señaló a la viuda.
Fuentes presentes en esa declaración han asegurado a laSexta que Madalena solo amplió algún detalle de lo que ya contó el primer día. Que ya dijo entonces que no vio a los encapuchados y que, a ella le alertaron los gritos de su hermana. Fue entonces cuando bajó y se encontró a su cuñado con la cara desfigurada.
En esa declaración también explica que salió corriendo para pedir auxilio y que coincide que hay un grupo de turistas y una celadora de un hospital. Es esta mujer la que entra a asistir a Toño, que justo fallece en ese momento.
Pero la Guardia Civil sí descarta la teoría de los encapuchados. Nadie los vio. Ninguna cámara los grabó. Tampoco han podido recoger huellas, por lo que los agentes van a volver a revisar cámaras y los móviles que aparecen a menos de 500 metros de la granja.
Sobre la autopsia, la conoceremos pronto. También va a ser fundamental el informe toxicológico, para saber por qué Toño no ofreció resistencia, y veremos si se produce la reconstrucción de los hechos en la vivienda, con la viuda y la hermana, que son las dos únicas personas que, de momento, sabemos que estuvieron en la escena del crimen.