La primera noche de Halloween sin restricciones pandémicas en España ha coincidido con un triste aniversario: los diez años de la tragedia del Madrid Arena.La muerte de cinco jóvenes y las deficiencias en la organización encontradas en la investigación supusieron un antes y un después en laseguridad de los espacios nocturnosen España. Los expertos creen que se ha avanzado en concienciación y en prevención en esta década, pero que todavía quedan grandes lagunas que solucionar.

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¿Cómo me afecta? Esta noche de Halloween quienes busquen fiestas organizadas se encontrarán con un panorama general en cuestión de seguridad "mucho más positivo", según el experto José Luis Gómez Calvo. El autor de uno de los principales informes sobre la tragedia del Madrid Arena afirma que se "ha mejorado en el control de aforos y se han aumentado las inspecciones".

  • Sin embargo, la gran carencia, según el experto, sigue siendo la falta de una reglamentación general: "Se depende excesivamente de la buena voluntad de los locales y organizadores porque no se puede sancionar lo que no se ha normativizado". También sería recomendable aumentar las inspecciones "in situ" de las fiestas porque "el papel lo soporta todo", explica Calvo.
  • Junto con esta falta de reglamentos y controles específicos, los expertos echan de menos también mecanismos que permitan al usuario saber si el local está cumpliendo o no con el aforo permitido. "Existen luminosos que indican el nivel de ocupación de los locales, como se hace con los parkings, pero su utilización está lejos de ser obligatoria. Tenerlos sería muy beneficioso", explica Calvo.
  • Este control de aforo no se debe limitar únicamente al número de personas que accede a un espacio de ocio, sino también a cómo se distribuyen dentro de él. Los expertos reclaman la presencia de profesionales bien formados que prevengan la excesiva acumulación de público en zonas determinadas de locales y discotecas. Éste fue precisamente uno de los errores del Madrid Arena, según las conclusiones del juicio que acabó con siete personas condenadas. La actuación del DJ Steve Aoki en la pista central precipitó la avalancha aquella noche, que se vio agravada por las deficiencias en las salidas de emergencia y de formación del personal de vigilancia.

¿Qué puedo hacer yo? "El consumidor no tiene ninguna forma anticipada de saber si un local está respetando su aforo antes de acudir a la fiesta", explica Eztizen Gregorio, portavoz de la OCU. "Lo que recomendamos es que si se detecta una excesiva afluencia se contacte con la policía municipal para alertar del peligro. Es posible reclamar la devolución del importe de la entrada si se revelan deficiencias en la seguridad", informa Gregorio.

  • Entre los marcadores y "chivatos" que deben ponernos en alerta, los expertos destacan la presencia de público en pasillos o escaleras, cualquier tipo de obstaculización de las salidas de emergencia, el exceso de aforos o de acumulación y la falta de acceso al agua potable o la ausencia de ventilación".
  • Más allá de esta labor de vigilancia, poco más pueden hacer los usuarios de estas fiestas. "Desde las asociaciones de consumidores pedimos sobre todo que ayuntamientos y policías municipales realicen las inspecciones necesarias y destinen los recursos suficientes", explica Gregorio.

Y mientras tanto... El Ayuntamiento de Madrid ha lanzado, con un refuerzo de 270 agentes, undispositivo de seguridadespecífico para las fiestas de Halloween.

  • En la ciudad de Sevilla, la Policía Municipal ha llevado a cabo 35 inspecciones preventivas en locales de ocio. De estos espacios, 28 han sido sancionados, lo que revela deficiencias en nada menos que el 80 por ciento de ellos (la mayoría por falta de permisos).
  • Este dato preocupante coincide con la noticia este fin de semana del desalojo de un local de ocio en Sevilla que presentaba graves irregularidades en su seguridad. Trece menores resultaron heridos en la fiesta organizada por la sala Music Sevilla. Las salidas de emergencia estaban bloqueadas, el local carecía de agua potable y de ventilación suficiente, según los primeros indicios.