Un potente anticiclón, situado de manera casi estacionaria sobre las Islas Británicas, garantizará el paso de sucesivas borrascas por España durante todo lo que resta del mes de abril.

De hecho, los datos muestran que no habrá un solo día sin lluvia en algún punto del paísdesde hoy y hasta que concluya el mes, aunque probablemente el próximo viernes, 23 de abril, estas serán escasas.

Asimismo, es muy probable que la península Ibérica sea uno de los puntos más lluviosos de toda Europa durante los próximos 10 días. De hecho, en Córdoba, Cáceres o Madrid, los registros serán más altos que los de en Londres, Dublín o Bruselas.

En Valencia, por ejemplo, se prevé que caigan unos 30 litros por metro cuadrado, mientras estos valores son todavía más altos en provincias como Segovia (50 litros) o Córdoba (70 litros). Para entender la magnitud, en Bruselas caerán en estos días unos 2 litros por metro cuadrado, mientras en Dublín y en Londres no se superará la unidad.

Este miércoles llega una nueva borrasca por el oeste

La previsión indica que este miércoles se reactivarán las precipitaciones en el sur de Galicia, el oeste de Castilla y León y el norte de Extremadura al final del día. Además, llueve con fuerza esta mañana en Cataluña y Baleares. Por la tarde, reaparecerán las tormentas en zonas montañosas del interior del país.

El jueves, en cambio, la zona del mediterráneo será la que experimente más precipitaciones. Así, será el día más lluvioso del episodio en esa zona del país, y es probable que de manera puntual se superen los 20 litros por metro cuadrado.

Aun así, la gran borrasca llegará el fin de semana, donde las lluvias se sucederán en prácticamente todo el territorio español; aun así, serán menos intensas en los extremos norte y este. Por la gran cantidad de zonas a las que afectará la borrasca, por extensión será el fin de semana más lluvioso de la primavera.

Junto con eso, se aproxima una DANA a partir de la semana que viene, debido a que este escenario nos llevaría a una recta final de abril excepcionalmente lluviosa, que nos dejará probablemente gran parte del agua que, sobre todo el mes de marzo, no había caído anteriormente.