Según ha informado la Jefatura Superior de Policía en un comunicado, las autoridades rumanas habían cursado una Orden Europea de Detención yEntrega (OEDE) y advertían de la "peligrosidad" del fugitivo, debido a la "violencia" que empleaba.

Tras las investigaciones realizadas, la Policía Nacional localizó su posible domicilio en la ciudad madrileña de San Fernando de Henares e identificó el vehículo que podría estar utilizando, por lo que se estableció un servicio de vigilancia y control en la zona.

Como resultado, se detectó la presencia de una persona con características físicas similares a las del fugitivo aproximándose al vehículo identificado, por lo que se procedió a su filiación. El sospechoso presentó una carta de identidad de Rumanía con datos que no coincidían con los aportados por las autoridades rumanas, aunque la fotografía sí correspondía con la persona identificada.

Una vez trasladado a dependencias policiales, el Grupo de Policía Científica de la Comisaría de Coslada cotejó sus huellas dactilares y comprobó la falsificación de los datos de filiación, por lo que se procedió a su inmediata detención.

Paralelamente, tras las gestiones realizadas, la Embajada de Rumanía en España acreditó que los datos aportados por el detenido correspondían a otra persona, aportando la fotografía del verdadero titular.