La policía municipal detuvo a un vecino de Reus de 45 años, que conducía un turismo modelo Audi A6, por un delito contra la seguridad del tráfico y otro de quebrantamiento de condena.
En las pruebas de alcoholemia, dio una tasa de 1,13 miligramos de alcohol por litro de aire aspirado y, además, tenía el permiso de conducir suspendido por resolución judicial.
Los agentes detuvieron el vehículo al observar que circulaba con llamas en los asientos de atrás y el conductor bajó del coche e intentó apagar el fuego con las manos, por lo que sufrió quemaduras.
Primero le atendieron los servicios médicos, aunque al final le trasladaron al hospital de Sant Joan mientras la Guardia Urbana sofocaba el fuego con el extintor del coche patrulla.