La Guardia Civil ha detenido a un cura que ejerce en Canillas del Aceituno, un pueblo de la provincia de Málaga, por el presunto quebrantamiento de una orden de alejamiento tras la denuncia interpuesta por una mujer que dice haber convivido con él siendo ambos pareja. Según denuncia la mujer, este cura y ella mantuvieron una relación sentimental entre marzo y junio de 2021.
Según han informado a Europa Press fuentes de la investigación, la detención se llevó a cabo el pasado 4 de septiembre. El arrestado es R.J.B, nacido en Venezuela en 1985 y cura en Canillas de Aceituno, un municipio de unos 1.600 habitantes, y la denunciante responde a las iniciales de J.M., también nacida en Venezuela en 1992.
Por parte de la mujer consta una denuncia ante la Policía de Torremolinos (Málaga) y también otra en octubre de 2022 en la comisaría de Ciudad Lineal, en Madrid, ciudad a la que se mudó tras las supuestas desavenencias con R.J.B. Un juez había decretado una orden de alejamiento tras abrir una investigación en la que consta que R.J.B acosaba con llamadas de teléfono a esta mujer, así como el envío de mensajes en los que le reclamaba que regresara a Málaga.
La detención se llevó a cabo por parte de la Guardia Civil tras denunciar este mujer un incidente cuando conducía en la A-7, a la altura de un centro comercial de Rincón de la Victoria (Málaga), y R.J.B. se situó con su coche al lado. De acuerdo a su denuncia, el cura aminoró la velocidad y luego aceleró, dándole además de forma puntual luces largas, en una actitud que mantuvo durante la conducción por la citada vía durante un tiempo, según precisan las citadas fuentes.
Tras conocer los hechos, el Obispado de Málaga se ha pronunciado con un comunicado en el que aseguran que el párroco está fuera del pueblo. Además, la Diócesis de Málaga ha precisado que aunque ambas partes se cruzaron denuncias, solo le impusieron a él la orden de alejamiento. Y explican que no intervinieron al tratarse de cuestiones personales entre dos adultos.
La detención de este cura ha trascendido días después de que la Policía Nacional detuviera a otro sacerdote en Málaga por presuntamente agredir sexualmente a varias mujeres a las que sedaba y grababa.
La investigación partió en este caso de Melilla, donde ejerció este cura hasta su traslado a Málaga, debido a la denuncia de su pareja tras localizar en el domicilio que compartían un disco duro que contenía fotografías y vídeos donde aparecían varias mujeres semidesnudas, dormidas o bajo los efectos de algún sedante y a las que un hombre les realizaba todo tipo de prácticas sexuales.
