La detencióneste lunes del presunto autor de la brutal agresión a un sanitario en el Metro de Madrid es su tercer arresto este año. El joven de 19 años ya había sido detenido previamente por delito contra el patrimonio y por incumplir la Ley de Extranjería.

En el momento de su detención, intentaba fugarse porque se sentía perseguido; para huir, se acercó a una vivienda del barrio de Villaverde a recoger algunas cosas. Según explica un portavoz de la Policía Nacional, "se le localizó en las cercanías de una estación de Metro cercana a su domicilio y se le hizo un seguimiento cercano, siempre sin perderle de vista", hasta que "se le detuvo prácticamente a las puertas de su domicilio".

Aunque el ahora detenido se había teñido el pelo de rojo y se había quitado sus pendientes de aro, de poco le sirvió, puesto que los agentes le tenían muy localizado. Varios efectivos policiales, de paisano, llevaban horas atrincherados en las inmediaciones de su domicilio para detenerle. De acuerdo con la Policía, "en ningún momento opuso resistencia" a su detención y "se vio sorprendido por la actuación policial, que fue muy rápida".

Desde entonces, Juan Camilo Londoño, de 19 años, se encuentra en dependencias policiales acusado de un presunto delito de lesiones graves por agredir a un enfermero que le había pedido que se pusiera la mascarilla en el Metro.

Desde entonces, la víctima no tiene visión en el ojo y, según apunta el jefe de Investigación de laSexta, Manuel Marlasca, si "definitivamente pierde la visión", su agresor podría ser acusado de "lesiones graves, agravadas además con la pérdida de un órgano importante, con lo cual se podría enfrentar hasta a 10-12 años de prisión".

Es la tercera vez en este año que la Policía detiene a Londoño, que previsiblemente pasará a disposición judicial este mismo martes. La primera fue en febrero, en Palma de Mallorca, por no respetar la Ley de Extranjería. La segunda fue a principios de julio, también en Palma, y por el mismo motivo, además de por comprar material robado. Según apunta Marlasca, "tenía un antecedente por receptación y tenía marcada una busca y captura".

Tras su detención este lunes, la Policía sigue intentando concretar qué utilizó para perpetrar el ataque. Según informa Marlasca, los primeros testigos a los que tomó declaraciones la Brigada Móvil de la Policía Nacional hablan de un puño americano.