La Guardia Civil ha detenido al actor de cine porno Nacho Vidal y otras dos personas por su presunta implicación en el homicidio imprudente del fotógrafo José Luis Abad durante la celebración de un ritual místico basado en la inhalación de vapores de veneno de sapo, según confirma el TSJ de Valencia.

Según informa Manu Marlasca, los otros detenidos son la prima y un amigo del actor porno. Los tres aseguraron a la Guardia Civil que el hombre murió tras consumir una sustancia que él había llevado. Sin embargo, los agentes localizaron un vídeo en el que se ve cómo los ahora acusados le facilitan la sustancia en el ritual en la casa de Enquera, en Valencia.

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 2 de Xàtiva recibió a los tres detenidos el pasado viernes y decretó para ellos la libertad provisional. Los tres han quedado investigados en una causa abierta por un delito de homicidio por imprudencia.

Ritual de veneno de sapo

Los hechos ocurrieron en julio de 2019 en la localidad valenciana de Enguera, durante un ritual que consiste en fumar las escamas del veneno de un sapo para entrar en trance. Tras ello, el conocido fotógrafo de moda entró en parada cardiorrespiratoria, un infarto que le provocó la muerte en minutos pero, pese a sus convulsiones, ninguno de los presentes intervino ni llamó a Emergencias. Según apunta Marlasca, el fallecido había acudido allí para curar su adicción a la cocaína.

Tras la investigación desarrollada durante 11 meses, se ha podido constatar la existencia de un delito de homicidio por imprudencia y un delito contra la salud pública, según detalla la Guardia Civil en un comunicado en el que no cita nombres.

En numerosas grabaciones se puede ver al actor porno asegurando sentir "paz" al consumir esta sustancia y, según afirmó, incluso le ayudó a superar sus adicciones: "No he vuelto a tomar coca ni alcohol", apuntaba.

José Luis Abad contactó con el actor a través de su prima. Entonces, quedaron en probar el veneno, que se obtiene de las glándulas de un sapo procedente de centroamérica. Sin embargo, los científicos la califican como una sustancia que puede desencadenar psicosis.

Según el abogado de Nacho Vidal, cuando el fotógrafo sufrió la parada llamaron a la ambulancia y, hasta ahora, se había considerado una muerte accidental. Ahora ha sido detenido, aunque ha sido puesto en libertad a la espera de juicio.

Así, la investigación ha podido demostrar que se trataba de una actividad habitual con fines terapéuticos o medicinales que, en sí misma, suponía un "serio riesgo" para la salud pública, pero que quedaba "enmascarada ante lo que parecía un ritual ancestral aparentemente inofensivo, que captaba personas fuertemente sugestionadas".