Luke es un niño de cuatro años que tiene síndrome de Down, epilepsia y problemas de corazón, por lo que necesita atención a tiempo completo. Por esto, sus padres decidieron contratar a una niñera para que pudiera cuidarle un día a la semana.

Pero, a raíz de la contratación de la 'babysitter', la actitud de Luke cambió. Ante este cambio, los padres decidieron colocar una cámara oculta para poder ver lo que sucedía cuando estaba la niñera en casa, ante lo que se llevaron una tremenda sorpresa. La mujer agredía y maltrataba al pequeño en repetidas ocasiones y sus padres no eran conscientes de ello.

Ahora, los padres han denunciado a la asistenta y han presentado las imágenes como prueba crucial en el caso. La Fiscalía estadounidense acusa a la niñera de agresión a menores en segundo grado.