Según informa el cuerpo policial en un comunicado, se han realizado 14 registros en Mallorca, y en uno de ellos, llevado a cabo en Palma, se desmanteló el laboratorio donde fabricaban las medicinas ilegales. También se realizaron registros en gimnasios, entre ellos uno ubicado en Magaluf (Calvià) y tiendas de nutrición deportiva, usados como puntos de venta de los productos.
Las 26 personas han sido detenidas como presuntas autoras de delitos contra la salud pública y con esta actuación se ha evitado la distribución de unas 100.000 dosis de más de 80 tipos distintos de sustancias prohibidas, destaca la Policía.
En la trama están implicados entrenadores personales y un médico jubilado que cobraba por expedir recetas de determinados medicamentos a la organización. Las pesquisas iniciales identificaron al presunto líder del grupo, el propietario de un establecimiento de productos nutricionales, que utilizaba supuestamente para distribuir los productos ilícitos.
También se llegó hasta el proveedor de las sustancias, que ya había sido detenido con anterioridad por distribuir y vender medicamentos similares. La Policía descubrió que estas dos personas formaban parte de un entramado que disponía de la infraestructura necesaria para producir y distribuir los medicamentos ilegales.
Durante la investigación se destapó que, para financiar parte de la trama, se dedicaban también a la producción y venta de marihuana que era gestionada por menores de edad y su consumo también estaba dirigido hacia este grupo de edad.