Un traumatólogo del Hospital de Medina del Campo, en Valladolid, ha sido denunciado por 26 sanitarios acusado de realizar tocamientos a mujeres cuando se encontraban sedadas. Lo hacía antes y después de las operaciones, cuando la anestesia tenía efecto, y lo hacía con especial ahínco en jóvenes y niñas.

Ana Galán, delegada sindical de UGT en el centro, ha asegurado que "tocaba los órganos mamarios en las mujeres" o "metía la mano en la sabanilla para recolocar algo que no había que recolocar porque, directamente, no había nada". Los sanitarios presentaron la queja formal ante el personal de quirófano y reanimación y, según Galán, tienen miedo de posibles represalias.

"Que dejen de intimidarles", ha reclamado la dirigente sindical. El acusado falleció en un accidente de tráfico el pasado jueves, 3 de junio, en plena recta -caso que aún se investiga-. Le acababan de anunciar que, tras muchos años de trabajo, le daban de baja y le abrirían expediente. Sucedió muy poco después de que la Consejería de Sanidad de Castilla y León abriera una investigación y elevara a la Fiscalía los presuntos abusos.

Tras conocerse la denuncia se ha producido varias dimisiones en el centro; por el momento, cinco. Los sindicatos suman una denuncia más: los hechos se conocían desde hace tiempo y no se hizo nada para aplacarlo. "Se han encontrado denuncias por hechos similares desde 2019 de la que no teníamos constancia", asegura Miguel Holguín, representante regional de UGT.

La Junta de Castilla y León niega cualquier ocultamiento, pero ha lanzado una investigación reservada. Los sindicatos se han referido a denuncias anónimas sobre los mismos hechos desde hace dos años, pero nada cambió: el traumatólogo siguió trabajando hasta el pasado jueves, cuando murió. La Junta de Castilla y León ha prometido personarse como acusación si el caso trasciende a lo penal.

¿Cuáles son las consecuencias?

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