Decenas de personas hacen cola para ser desplazados, con este autobús, a un albergue. Hasta que el cupo parece que se llena. Este hombre se ha tirado frente al autobús, para intentar pararlo.

"Nos tendremos que meter en las estaciones de metro o donde podamos", explica uno de los afectados. Estos dos hombres dicen que van a pasar la noche aquí, en la calle, porque esta vez se han quedado sin plaza en el albergue.

No son los primeros ni los últimos, según el sindicato Co-bas. Denuncian que los albergues están saturados. "Están saturados por muchos motivos: por la llegada de solicitantes de asilo que ante la gran espera para poder iniciar los procedimientos tienen que darse en situación de calle", explica Susana Pérez, portavoz de la Sección Sindical Samur Social de Co-bas.

Un joven refugiado de Venezuela nos explica que él también se ha llegado a quedar sin plaza y que ha tenido que dormir en la calle. Desde el Samur Social admiten que la ocupación es alta pero que ninguna persona "vulnerable" se queda fuera.

También reclaman más ayuda del resto de administraciones. "Al final se quedan en calle personas que podían estar en otros recursos", explica Dario Pérez, jefe de servicios de Samur Social.

El Defensor del Pueblo ha abierto una investigación, ya que tiene constancia de familias con niños que se han quedado en situación de calle.